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Cada época, cada era, tiene a sus propias figuras más deseadas. Hombres y mujeres que llaman la atención de todo el mundo y que se convierten en rutilantes estrellas, de la noche a la mañana en muchos casos, como objeto de deseo de sus semejantes. En los últimos tiempos lo hemos visto con mujeres hermosas como Scarlett Johansson, Angelina Jolie o, un poco antes, la inconfundible Reina del Pop, Madonna. La cantante americana supuso toda una revolución en  los años 80, convirtiéndose en una auténtica sex symbol que paseaba su erotismo sin ningún tipo de tabú por los escenarios de todo el mundo. En el año 1990, en la presentación de los premios de la MTV, la diva realizó una coreografía espectacular para su canción Vogue, con un look inspirado en la famosa cortesana Madame de Pmpadour.

Era como si dos de las mujeres más deseadas de su tiempo se hubieran fusionado en una sola, y tal vez esa era la intención de la propia Madonna, conocedora de la historia de Pompadour y de su consideración posterior como casi una prostituta, cuando en realidad solo fue amante del propio Rey Luis XV. Lo que pocas veces se comenta es su pasión por las artes y como logró impulsarlas en el París de su época, demostrando un conocimiento espectacular de toda la tradición clásica, y siendo una mujer interesantísima, elocuente y adelantada a su tiempo en muchas cosas. Su figura todavía está rodeada de un halo de misterio, y por eso hemos querido realizar este artículo, hablando sobre cómo era en realidad esta cortesana que tanta tinta ha hecho correr en estos siglos.

Biografía de Madame de Pompadour

De nombre real Jeanne-Antoinette Poisson, la cortesana nació en la capital parisina en 1721, hija de un defraudador de Hacienda y de una hermosa mujer que solo cuidaría de ella hasta 1725, momento en el cual la niña ingresa en un convento donde empieza a ser educada ya en los principios cortesanos. En 1730, a la edad de nueve años, su madre va a por ella y juntas se instalan en París, junto al nuevo marido de Madame Poisson, quién educa a Jean Antoinette como si fuera su propia hija. La educación que recibe es portentosa, la mejor que se le podía pagar, y aprende desde equitación hasta poesía, conociendo a los grandes clásicos y aprendiendo también a declamar y a servir como una auténtica señorita.

Ya con quince años empieza a acompañar a su madre a sus eventos de sociedad y a los diferentes salones donde conoce el gusto por conversar sobre literatura y arte, que también marcaría su vida. De primorosa belleza, la joven empieza a llamar la atención de muchos hombres, y su madre, junto a su tutor, eligen a un apuesto joven adinerado, Carlos Guiller Le Normant, como su esposo. La joven se casa con él y al poco tienen su primer hijo, que fallece poco después del parto. En 1744 nacería su hija Alexandrine, aunque la cortesana ya empezaba a mirar hacia palacio, donde había quedado libre algún hueco de confianza en la propia corte de Luis XV. Con la ayuda de algunos amigos y conocidos cercanos al monarca, Poisson consiguió seducirle y ganarse su confianza.

¿Era Madame de Pompadour una prostituta?

Es en este momento cuando se produce el cambio vital más importante para Jean-Antoinette, ya que gracias a convertirse en persona de confianza para el Rey Sol a partir de 1745, su importancia dentro de la corte se hizo cada vez mayor. La joven, de extraordinaria belleza y juventud, enamoró al monarca, que siempre la tuvo como su “favorita”. Era algo bastante habitual encontrar a jóvenes cortesanas en palacio, y de todos era sabido que esas jóvenes solían ser amantes del propio monarca, pero eso dista mucho de considerarlas como prostitutas. En el siglo XVIIII, el estar dentro de ese círculo de confianza del rey era un auténtico halago, y las chicas que pretendían llegar utilizaban todas sus armas para conseguirlo.

La palabra cortesana, de hecho, ha llegado hasta nuestros días con cierto tono despectivo, precisamente por historias como la de Madame de Pompadour, considerando muchos que no es más que un eufemismo para hablar de prostitución consentida dentro de la corte. De hecho, Poisson no era la única dama cortesana en la corte, y en sus últimos años incluso favoreció los encuentros del Rey con otras jóvenes que, como ella, buscaban hacerse un hueco en el círculo íntimo del monarca. Su relación con la Reina siempre fue cordial, y aunque los encuentros sexuales cesaron a los pocos años de entrar en la corte, la joven siempre siguió siendo la favorita para Luis XV, ocupando cargos de confianza y alentándole en muchas decisiones importantes para el país.

Últimos años de vida

Su presencia dentro de la corte fue importantísima prácticamente desde su llegada en 1745, pero es cierto que con el tiempo ganó aún más preeminencia, gracias a ser una de las personas de más confianza del propio monarca. Durante este tiempo le ayudó a tomar decisiones importantes, e incluso fomentó las artes y la cultura a través de los salones que solía acoger tanto en Versalles como en sus propios palacios. Después de organizar muchos eventos para el Rey y servirle como su favorita durante casi veinte años, la cortesana falleció en 1764 víctima de una neumonía. Apenas había cumplido 42 años, pero había tenido una vida muy completa y llena de momentos importantes, dejando su figura ya para la posteridad.

Película de Madame de Pompadour

Más allá de aquella referencia bastante obvia que le dedicó Madonna en su presentación en los premios MTV de 1990, Madame de Pompadour también ha aparecido en varias películas y series de televisión. Seguramente la más importante sea la miniserie francesa lanzada en 2006 con la dirección de Robin Davis, y donde el papel de Jeanne-Antoinette Poisson es interpretado por la joven actriz francesa Hélène de Fougerolles, mientras que el conocido actor Vincent Perez interpreta al rey Luis XV. La miniserie es una adaptación bastante completa de la historia de la cortesana, fiel a lo que la historia nos ha dejado sobre ella, claro está, porque en aquellos tiempos, los rumores y las habladurías bien podían convertirse en relato oficial.